CÓMO DESHUESAR UN POLLO FÁCILMENTE
Lo más seguro es que hayas probado un pollo relleno, que conserva completamente su forma exterior, pero no tiene ningún hueso. El trabajo de deshuesar un pollo sin afectar a su aspecto exterior es bastante entretenido, pero no muy difícil. Hoy vamos a explicarte cómo hacerlo de la forma más rápida y sencilla.
En esta receta utilizaremos un pollo de corral de 2 kg de la mejor calidad Sánchez Roldán. Empezaremos quitándole las alas, debido a que no dan mucho margen para poder rellenar, así que las cortaremos y las guardaremos para hacer otro tipo de recetas. El corte se realiza justo donde está la articulación.
Cuando ya tenemos quitadas las alas, abriremos el pollo por abajo, y con nuestra mano separaremos la piel y la carne de las costillas de la zona. Además, retiraremos la ternilla o triángulo de la zona centro mediante un cuchillo afilado.
Colocaremos el pollo con el culo hacia arriba y separaremos los huesos de la carne con un cuchillo. Una vez lo tengamos hecho, quitaremos esa parte de la carcasa estirando.
Para poder quitar la otra parte del esqueleto, perfilaremos el cuello con el cuchillo y le iremos dando la vuelta al pollo como si estuviéramos dándole la vuelta a un calcetín. Seguiremos separando el resto y lo retiraremos.
En el caso de los huesos del muslo, haremos presión de fuera hacia adentro y, cuando veamos que asoma, ayudaremos a pelarlo con el cuchillo. Seguidamente volveremos a apretar hacia afuera y, en cuanto salga el fémur, lo cortaremos. Con el otro muslo haremos exactamente el mismo proceso.
En este paso ya tendremos casi el pollo del revés completamente. Llegaría el momento de darle la vuelta, metiendo la carne de los muslos en su hueco y dando al pollo su forma original.
¡Listo para rellenar! ¿A que resulta sencillo?
Te esperamos en tu tienda más cercana de Sánchez Roldán.